MAS Y MAS CARROCERIAS

En el mismo mes del año pasado comentamos la realidad del sector y la aparición de un punto de inflexión en las gráficas de estadísticas.

 Las previsiones de crecimiento para nuestra actividad (fabricación de carrocerías sobre vehículo rígido) en el año 2014 vaticinaban alrededor de un 10% de crecimiento en las cifras respecto al año 2013. Efectivamente las cifras no iban mal encaminadas y se llegó al 15%.

 Para 2015 las previsiones eran buenas pero las cifras, tras tres trimestres de datos, nos dicen algo más:

 El año 2015 está batiendo record de crecimiento con aumentos de producción de carrocerías cercanos al 40%, algo fuera de cualquiera de las mejores previsiones.

Sin duda que estas cifras tienen una lectura muy positiva para un sector tan castigado pero producir tanto en tan poco tiempo obliga a las empresas a un proceso de crecimiento y de inversión algo desmedido.

Con la dificultad de engranar una marcha larga en plena cuesta arriba, entendíamos un 10% de crecimiento anual como un crecimiento ralentizado y sostenible que podía posicionar al sector en 2 o 3 años en cifras de producción de carrocerías mas acorde al volumen de actividad que una sociedad como la nuestra debería tener. Pero al ritmo actual es posible que en meses lleguemos a niveles cercanos a las 15000 carrocerías/año y podamos llegar a ese equilibrio.

Pero no importa, hemos conseguido ajustar nuestras estructuras productivas y administrativas para hacernos eficientes en época de crisis y ahora que crecemos los hacemos con seguridad y mucho criterio. Nadie quiere caer en errores del pasado.

EQUIPAMIENTO Y SEGURIDAD: ESTIBA Y FIJACIÓN DE CARGA

La tecnología de los vehículos industriales y comerciales evoluciona al son de la legislación comunitaria y esto no deja de ser un ejercicio de responsabilidad social muy importante para todos.

 Niveles de emisiones y consumo de combustible que se consideraban inalcanzables hace no demasiados años, sistemas de frenado inteligentes que ayudan al conductor cuando todo parece perdido, sistemas de protección que hacen que los turismos no queden en clara inferioridad frente a los camiones e incluso sistemas que protegen al peatón o ciclista en caso de accidente.

 Los vehículos industriales y comerciales que circulan por nuestras carreteras tienen implementadas medidas de seguridad activas y pasivas a tal nivel, que casi parece imposible que se lleguen a producir accidentes.